Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de agosto, 2011

Hechos al día de hoy

¡Doy gracias a Dios por su Palabra! Estos días han sido emocionantes, pero estoy segura que si no fuera por el tiempo que puedo meditar en lo que Él dejó para nosotros, las cosas no tendrían sentido. He estado tratando de organizar lo que resta del semestre, pensando en los tiempos, compromisos, reuniones y prioridades. No quiero perder de vista varios temas y necesidades, pero creo que lo que más he disfrutado es meditar en el libro de Hechos. He tratado de ponerme al día con el estudio bíblico de los miércoles, porque cuando me fuí nos quedamos en el capítulo 15, pero ahora vamos en el 18. Asi que poco a poco estuve leyendo y meditando. Son relatos llenos de emoción , de personas transformadas de muy diversos contextos , de lugares donde llega el Evangelio y seguidores de Jesús buscando ser fieles a pesar del costo . Me llamó la atención la guianza de Dios a través de su Espíritu , impidiéndoles llegar a Asia y abriéndoles puertas para Europa primero. Me detuve en

Carta a una querida amiga,

Hoy hablamos por teléfono. Cómo te decía, durante el viaje te tuve presente y de manera muy especial, hoy quería compartir contigo lo que Dios está haciendo en mi corazón, lo que me enseñó estos días fuera de casa y quería escucharte. Varias veces rodaron lágrimas por mis mejillas, si te hubiera tenido enfrente hubiera llorado como lo hice cuando estuvimos juntas en el hospital. No era por tristeza, me conmovió escucharte, porque en verdad imaginé estar en tu lugar, no se me hace tan dificil ponerme en tus zapatos, y creo que lo entiendes, porque Dios nos ha regalado esta amistad y él nos ha unido de manera especial. No entraré en detalles, porque este es un espacio público, pero cómo te dije, quería escribir algo sobre nuestra plática. Me alegró mucho escucharte y entender mejor cómo Dios trabaja en medio de circunstancias de enfermedad y dolor. Soy testigo de cómo Dios tiene el control hasta de los detalles más insignificantes y doy gracias que lo ves con tanta claridad y eso te a

Pequeña meditación sobre cómo es Dios...

Barcelona, España Hoy por la mañana reflexionaba esta frase del Salmo 145: "El Señor es clemente y compasivo, lento para la ira y grande en amor." Al pensar en cómo es Dios y lo que significan estas palabras para mi, me detuve en lo que significa ser clemente y compasivo. .. Pero más aún, me detuve un buen tiempo en la parte de lento para la ira. Pensar en la lentitud de Dios de pronto suena extraño, pero en el contexto de la frase creo que explica mejor cómo es el amor divino. Las palabras hicieron eco porque contrastan con la idea que a veces albergo en lo profundo, acerca de Dios. El de alguien listo para castigar, que se enoja a la menor provocación y que actúa de forma airada. Es difìcil reconocer que esta imagen en ocasiones asalta nuestro corazón, pero por eso nos cuesta tanto trabajo confiar, porque no le conocemos, y tampoco reconocemos nuestras falsas ideas sobre Él. Marilyn Stuart, cuando expuso este Salmo en la Asamblea Mundial, nos recordaba que

hasta Budapest...

"Se hablará del esp lendor de tu gloria y majestad, y yo meditaré en tus obras maravillosas." Salmos 145:5 Intento hacer un recuento de los últimos días por la República Checa y Hungria, y este poema de David regresa mi mente. Hoy por la tarde pensaba en sus palabras, y reconozco que no me es tan fácil meditar en lo que Dios hace y está haciendo. Pero también veo cuan necesario es hacer un alto, considerar y reflexionar en las obras maravillosas de Dios a mi alrededor. Después de viajar por varios días por lugares muy lindos de Europa del Este, conociendo gente e historias de lo que Dios obra en otros contextos, puedo ver cómo se "habla" y se celebra la obra de Dios y estoy agradecida por ese privilegio. Pero también veo el riesgo de no detenerme y meditar en lo que esto significa para mi, y sólo ser una expectadora: alguien que no reconoce el obrar de Dios y por lo tanto no habla y proclama sus maravillas. Creo a veces el riesgo al viajar y ver tantos edifici

En Praha

Este viaje ha tenido muchas experiencias buenas y significativas. Justo ahora hemos hecho algunos cambios al itinerario, pero creo que Dios mismo nos abre -y personalmente estoy muy agradecida- un espacio de mayor descanso en medio de toda la agenda. Hace 2 noches viajamos por tren hacia esta hermosa ciudad en la República Checa y ha sido fascinante conocer un poco más de su historia y ver los edificios como huellas de un pasado que aún dialoga con su gente , que responde a las preguntas de los viajeros que la visitan. ¨ Aún sin querer, es difícil no comparar Polonia con la República Checa, y mas específicamente Cracovia con Praga. Y reconozco que mis apreciaciones son bastante subjetivas, pues solo he tenido destellos de ambos lugares. De Cracovia tengo conmigo un recuerdo muy lindo, porque fue un punto de encuentro de más de 150 naciones bajo un mismo Nombre, la amabilidad de los hermanos y hermanas polac@s fue especial, y disfruté de su comida e historia. También fue un encue

Un poco de lo que creo y siento al final...

4 de agosto, 10:15am Ayer terminó la Asamblea Mundial. Hoy estoy desvelada, he visto a muchos irse a sus paises de nuevo, y hay cosas que no quiero olvidar de este tiempo y experiencia. Es mucho, y veo la necesidad de escribir para dejar memorias, que esto se convierta en una manera de reconocer la gracia de Dios en mi vida y en el mundo. La gracia de Dios y su amor por mi se han hecho evidentes en lo profundo. No solo fui desafiada a pensar las redes sociales o los sistemas económicos desde una perspectiva cristiana, sino también a considerar el amor y la bondad de Dios para mi vida de forma personal. Dios es clemente y misericordioso, lento para la ira y grande en amor... (Salmos 145) Finalmente, es mi conocimiento intimo de Dios lo que me invita a llevar a otros tan lindo mensaje de un Dios que ama, está cerca, acompaña, cuida, sostiene y se ha dado a conocer de manera personal. Unas palabras de ayer fueron muy significativas, y las apropié, era algo asi: "Que sea nuestra ora