Hoy estudiamos, como cada miércoles por 3 años y medio, una porción de la Biblia. Con menos personas en la casa, aunque conscientes de todos los que han llegado a sentarse con Dios a la mesa y los muchos que se encontraron con él en esos miércoles, leímos Apocalipsis 10 y 11. Probablemente es el décimo libro de las Escrituras que estudiamos juntos, no somos los mismos, muchos han cambiado el rumbo, otros de ciudad, algunos siguen con nosotros, pero en otras partes... ¡Son muchos los que han pasado por un miércoles de estos, como el de hoy! Llegamos al momento donde a pesar de la complejidad del libro, ya entendemos mejor la manera en que Juan escribe, lo que significan algunos símbolos y lo fundamental que el viejito en Patmos quiere comunicar: la revelación de Jesucristo . Ya hemos comprendido que hay alguien que conoce TODA la historia, que es rey soberano, que tiene todo el poder, pero que se presenta como es, un Cordero herido para nuestro rescate . ¡El Cordero que está senta
Escribiendo de lo cotidiano, hablando sobre Dios, la vida, el mundo, la misión, las y los amig@s...