Hay algo fascinante de leer una carta que data de hace casi dos milenios con la confianza de que fue escrita para mí y para esta generación - aun sin ignorar que el remitente y el destinatario no son de esta época-. Los personajes mencionados en la carta estaban inmersos en un contexto distinto al nuestro, y eran un grupo de personas en una ciudad portuaria del imperio romano, dotados de la ciudadanía del imperio y con una creencia tildada como sectaria que fácilmente se identificaba como antiimperialista. El escritor, Pablo, invita a una manera de vida en comunidad francamente contracultural y hasta contraintuitiva , con una identidad fraguada para otro reino. El capítulo 2 de la carta a los Filipenses provee una invitación/desafío/mandato a ser como Jesús y tener la actitud de Jesucristo. Luego plantea la necesidad de vivir en el mundo, contrastando con los valores del mundo. Y finaliza con ejemplos de personas que siguen el ejemplo de Jesucristo con sus vidas. Par...
Escribiendo de lo cotidiano, hablando sobre Dios, la vida, el mundo, la misión, las y los amig@s...