Al parecer mi silencio en este sitio se debe a un silencio más profundo y personal. Despues del regreso de los estudios intensivos en Vancouver escribí mucho para mis clases y terminé un poco cansada. A pesar del plan de compartir en este blog sobre varios temas, fue dificil forzarme a escribir y mejor puse atención a algunos hilos del corazón. Hace apenas algunos días recordé lo que un maestro de la comunidad estudiantil nos compartió hace años y la idea era más o menos así: "Esta generación necesita palabras que comuniquen vida y sentido, no palabras huecas" . Y entonces pensé mucho.... Las palabras que traen vida y que llevan consigo sentido no son las que se dicen al aire o se rezan sin pensar, sino aquellas que han sido encarnadas, que provienen del silencio o se acompañan de profundo dolor o alegría, es decir, las que se han vivido. Si bien mucho de lo que comparto en este espacio son meditaciones, historias y reflexiones de vida, en las últimas semanas me he sentid...
Escribiendo de lo cotidiano, hablando sobre Dios, la vida, el mundo, la misión, las y los amig@s...