para que sepamos qué es ÉL.
Hoy vimos un estudio bíblico (Marcos 6:45) acerca de un milagro más privado, es decir, cuando Jesús camina sobre el agua y los discípulos se asustan al verlo, pensando que es un fantasma. Es un pasaje donde los discípulos llevan ya algún tiempo caminando con Jesús, ya lo han visto obrar milagros, sanar personas, liberar gente, alimentar a miles con solo 3 panes y 2 peces y han escuchado su esperanzador mensaje de buenas noticias del Reino. Aún así, no le reconocen.
Y es que nos parecemos tanto a estos discípulos, después de pocos o muchos días con Jesús, aún no le reconocemos del todo. Pero él, una y otra vez, nos muestra quien es. En esta ocasión le dice a los discípulos, en hecho y palabras, que él es Dios, que no tengan miedo, que él es Dios. Los discípulos no logran captarlo, no entienden todo lo que esto significa, pero lo entenderan después...Jesús no se dará por vencido.
Él hace lo mismo con nosotros hoy. Lo reconocemos, aún cuando somos lentos, podemos ver qué Jesús se nos presenta una y otra vez, en personas, en circunstancias de la vida y en momentos muy precisos y nos dice: Soy yo, no tengas miedo, soy yo. Cuando él llega la tormenta calma. Y eso lo vi el día de hoy. Porque Jesús nos ha mostrado a todas su interés por nuestras vidas, nos ha dicho que él está presente, que quiere nuestra atención y reconocimiento, quiere nuestro corazón y nuestro caminar. Hoy puso su mano y sanó a alguien, él aún sigue obrando sobrenaturalmente para que le reconozcamos... Gracias Dios.
Hoy vimos un estudio bíblico (Marcos 6:45) acerca de un milagro más privado, es decir, cuando Jesús camina sobre el agua y los discípulos se asustan al verlo, pensando que es un fantasma. Es un pasaje donde los discípulos llevan ya algún tiempo caminando con Jesús, ya lo han visto obrar milagros, sanar personas, liberar gente, alimentar a miles con solo 3 panes y 2 peces y han escuchado su esperanzador mensaje de buenas noticias del Reino. Aún así, no le reconocen.
Y es que nos parecemos tanto a estos discípulos, después de pocos o muchos días con Jesús, aún no le reconocemos del todo. Pero él, una y otra vez, nos muestra quien es. En esta ocasión le dice a los discípulos, en hecho y palabras, que él es Dios, que no tengan miedo, que él es Dios. Los discípulos no logran captarlo, no entienden todo lo que esto significa, pero lo entenderan después...Jesús no se dará por vencido.
Él hace lo mismo con nosotros hoy. Lo reconocemos, aún cuando somos lentos, podemos ver qué Jesús se nos presenta una y otra vez, en personas, en circunstancias de la vida y en momentos muy precisos y nos dice: Soy yo, no tengas miedo, soy yo. Cuando él llega la tormenta calma. Y eso lo vi el día de hoy. Porque Jesús nos ha mostrado a todas su interés por nuestras vidas, nos ha dicho que él está presente, que quiere nuestra atención y reconocimiento, quiere nuestro corazón y nuestro caminar. Hoy puso su mano y sanó a alguien, él aún sigue obrando sobrenaturalmente para que le reconozcamos... Gracias Dios.
Asi es... que impresionante es, yo tambien estoy sorprendida de todo lo que ha echo en nosotros... y como con algo tan sencillo como lo es solo leer y comprender su palabra nos hace crecer tantooooo solo comenzando con leer y comprender :) QUE MARAVILLOSSOOOO!!!!
ResponderEliminarHola!!
ResponderEliminarMuy lindo tu blog :)
Esta vez: De frente al mar.
¿Alguna vez tuviste experiencias con la frase "En la vida todo vuelve"?
Chusmea mi blog y opina
que tengas un her mo so día :)
Creo que todos somos un poco Santo Tomás: si no vemos, no creemos. Ahí está lo maravilloso de la fe.
ResponderEliminarSaludos cordiales.