Ir al contenido principal

Sobre el mayo francés y la primavera de Praga

Estos dos procesos históricos, como otros tantos, han sido estudiados a profundidad por aquellos interesados en los acontecimientos de 1968 en Europa. Mientras que el mundo estaba en plena Guerra Fría, y en diversos países se vislumbraba el descontento ante los valores de occidente o la represión del comunismo, pocos esperaban ver movimientos mundiales tan parecidos que se manifestaran en contra de algo.

Fue México, Praga, Francia, Polonia, Alemania, entre otros, donde diferentes grupos, bajo distintos intereses levantaron sus voces de juventud, de obreros cansados, de trabajadores inconformes contra sistemas represivos, egoístas, formas de vida tradicionales. Contra el status quo y contra aquello que había prometido y no se había realizado. O como es el caso de Francia, contra aquello que ya no les dejaba respirarar, contra los moldes donde muchos ya no cabían.

Este no es un ensayo histórico, tan solo son las ideas trasnochadas de una estudiantes de historia que reconoce en frases, imágenes e ideas sus propias inquietudes y que ve amor por el prójimo, deseos de superación y esperanza por un mejor mundo entre los gritos ahogados de la juventud y las pancartas de los trabajadores. No es mero idealismo, como aspirante a historiadora es lo primero que desaparece o de lo que se te despoja. Aprendes que detrás de las grandes revoluciones o transformaciones históricas hay motivaciones nefastas por beneficiar a los pocos, que la historia la conocemos por aquellos que la financiaron y que hasta el arte es para los pocos que así lo designan.

Sin embargo, algunos no renunciamos a identificarnos con lo acontecido y no queremos olvidar y que otros olviden que en el ser humano también está la capacidad verdadera de amar, transformar y hacer el bien. De luchar hasta la muerte por lo que se cree justo y soportar lo inimaginable por razón de ello. Por eso me gusta pensar estas historias que nos cuentan los libros, el internet y las fotos. Esas de los estudiantes inconformes, las de los trabajadores que lucharon, la de los pueblos que se unieron por la paz, por " un rostro humano del socialismo" e incluso los que gritaron: ¡Dios no es conservador! (Reconociendo que la imagen de un dios que justificaba los fines de alguna institición religiosa no era verdaderamente Dios, pues él tampoco reducia su voluntad a una filiación política.)

Hobsbawm dice que será la historia la que puede salvarnos de nosotros mismos. Mientras que algunos historiadores "posmodernos" ya no se interesan tanto en el cómo de la historia sino el para qué. Si esta es capaz de dar razón de lo que hoy somos y de liberanos, entonces vale la pena contarla. Para ellos la Historia ya no existe, pero podemos creer en las historias si estas nos incluyen, nos explican, nos ayudan a caminar la existencia humana a partir del pasado, en el presente, hacia el futuro.

Por su lado, Certeu, habla de la revolución simbólica que representa un mayo francés. Para él, lo importante estuvo en la denuncia, en la forma que transformó las palabras, los símbolos. En la toma de la calle como si se tomara el poder, en hacerse manifiesta la existencia de los otros. No triunfó, pero tampoco fue derrotada, anunció algo. Certeau lo ve y nos lo indica, para él, el mayo francés fue eso, una toma de la palabra por aquellos que habían callado, y al tomarla, la transformaron, le dieron un significado propio.

Por eso creo que importante leer con el corazon... Porque cuando leemos historias consciente de quienes escriben, conocemos lo que otros son y de lo que son parte. Porque cuando estudiamos lo que la historia nos dice del pasado, revela por donde hemos caminado y lo que podemos aprender. Hasta puede darnos esperanza si buscamos más allá de ella... Encontramos hombres y mujeres que sin empuñar las armas han tranformado sociedades y que pese a sus debilidades y limitaciones han revolucionado símbolos, prácticas, palabras y corazones.

Comentarios

  1. Hola! Quisiera saber si pensas que un acontecimiento incidió en el otro y de qué forma?

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

"Dios no está muerto" (reflexiones de una pelicula)

Desde hace varios meses tenía el deseo de ver “Dios no está muerto”, pero hasta el día de hoy me di la oportunidad. Mi interés por ver la pelicula aumentó porque este fin de semana, en nuestro campamento de Compa Chihuahua algunos estudiantes tendrán una noche de cine y han elegido ésta. Por lo tanto, el objetivo de mi publicación es proveer algunas líneas de reflexión y preguntas que nos permitan acercarnos con una mejor comprensión de las ideas que propone la pelicula y de nuestro propio contexto como cristianos evangélicos universitarios en México. De entrada, "Dios no está muerto" me parece un buen esfuerzo por “hablar” de Dios en un contexto secularizado. Provee algunos recursos para que los estudiantes cristianos no se atemoricen ante algunos discursos científicos que niegan la existencia de Dios. En los diálogos entre el personaje principal y su profesor se nos deja ver la manera en que la ciencia es un discurso usado subjetivamente, y provee un balance con argum

Nehemías (parte 1)

"Antes de edificar"  Ante la invitación de dar las conferencias en un campa de Compa en Veracruz trabajé tres exposiciones sobre el libro y la vida de Nehemías. Publicaré una por semana, esperando que mis notas sean de utilidad, reflexión y edificación a quienes me acompañen. Esta exposición es del capítulo 1.  Introducción Debo confesar que al principio tuve cierto prejuicio con la historia de Esdras y Nehemías. No me llamaba la atención la historia de una construcción y mucho menos de un muro,pues vivo en Tijuana, una ciudad marcada por un tremendo muro que divide familias….Entonces, tengo cierto resentimiento contra los muros… Pero reconozco que después de adentrarme en la historia de Nehemías y su mundo, me encuentro cautivada. Es una historia que implica mucho más que la construcción de un muro, es la historia del pueblo de Dios en el exilio (en el destierro) y de cómo ese pueblo se identificó con la historia de Dios para el mundo y para ellos, y comenzó a vivir

El embarazo y el parto -mi experiencia, las prácticas y políticas y la espiritualidad del alumbramiento-

Una gran parte del sabático la pasé embarazada. Fue un lindo regalo de gracia, vida, amor y de espera en Dios. El embarazo en general fue “fácil”. Lo más difícil fueron las náuseas de las 6  a las 12 semanas, pero gracias a un medicamento seguro todo se hizo más llevadero. En esas semanas viajamos con amigos a Estados Unidos e hicimos caminatas en la nieve sin problema. En el segundo trimestre, Luciana viajó conmigo a una junta de trabajo a Alemania (la única durante el sabático) y a otra escapadita de papá y mamá al “otro lado del charco”. En dos ocasiones Luciana me acompañó a predicar. Justo después de saber que esperábamos una niña pude comunicarlo a nuestra iglesia local aquí en Vancouver, anunciando que no estaba predicando yo sola frente a ellos, sino con una niñita dentro de mí. Ese reconocimiento me hizo aún más consciente de ella. Me conmoví al recibir la comunión en Regent cuando una amiga me convidó del pan y el vino diciendo que eran el cuerpo y la sangre de Cristo entre