Bueno, realmente han sido días bien diferentes a como los esperaba. Inició un nuevo semestre, el último para mi y a la vez uno que promete estar lleno de cosas nuevas, de mucho que aprender, disfrutar, conocer y arriesgar. Porque mientras los semestres han sido mi forma de entender los tiempos que vivo estos últimos 7 años, ahora, este último promete que las vacaciones venideras serán más largas, pero con otras características.
Creo que serán unas vacaciones escolares permanentes, hasta que de nuevo me convierta en una estudiante matriculada en posgrado, pero por mientras, seré estudiante de la vida y seguiré diviendo mi tiempo en semestres, porque así lo hacen aquellos a quienes anhelo servir, acompañar y amar estos años que vienen.
Solo he podido estar dos días en la universidad desde que llegué de CR. Mi cuello no me ha permitido mucho, pero mi corazón ha estado 100% ahí. Vi a una amiga de tiempo, que por circunstancias adversas dejó la escuela, pero ahora ha vuelto y me sigue dando la oportunidad de ser amiga y compartirle sobre Jesús, el que cambió mi vida. También he visto a otros que son caras conocidas, pero sus corazones me estaban velados. Hoy especialmente agradecí por una conversación que me hizo ver como Dios obra de maneras maravillosas y sorprendentemente sencillas y que mientras uno se siente incomprendido por ser cristiano, por no adaptarse al molde religioso y por solo querer hablar de Jesús en la escuela, hay otros que viven lo mismo y nos encontramos allí! Esta amiga que hoy conocí mejor, me dejó conocerla más de cerca y eso le agradezco, me enseñó mucho.
Tal vez de las emociones más bonitas de estos días ha sido estar en contacto con los compas de Oaxaca. Haber hecho contacto nuevamente, después de casi un mes me ha dado un gozo bien profundo, porque sé que a pesar de las dificultades, del contexto político complicado de la UABJO y de los mil obstáculos que puedan existir, hay estudiantes en la brecha para hacer algo, para llevar buenas noticias de verdad a sus compañeros, a su mundo, a su escuela. Y aunque sea de lejos, me encanta escucharlos, ser parte y si se puede, acompañarlos.
...estos días también he leído de más. La característica es que ha sido mucho sobre mujeres. En el evangelio de Lucas sobre mujeres, el libro de Hacer Teología junto a María, otro sobre ensayos desde el feminismo teológico latinoamericano y una novela de la tica Ana Cristina Rossi. Todo me ha llevado de reformularme algunas preguntas, a ver la reivindicación de Jesús, a amar mejor a la mujer y al hombre, a querer relaciones sanas, reconciliadores, que expresen el verdadero propósito del Creador y a preguntarme, ¿cómo, desde mi trinchera como estudiante, obrera, amiga, hija, lectora y de pronto escritora de blogs, puedo ser portadora de estas buenas noticias de Jesús para todas y todos? Donde nadie se excluye, donde la experiencia de conocer a Jesús no se limita a una sola vivencia, en un solo lugar, bajo una sola condicionante, y donde el ser mujer también es importante... y donde el descubrirlo es parte de reconocernos como creación de Él, amadas por Él.... No tengo la respuesta, pero estas lecturas aun inconclusas me han ayudado: junto con las conversaciones matutinas y nocturnas con el que me hace plantearmelas, y bueno, mucho de lo que hoy soy y pregunto también tiene que ver con esas mujeres que me han sido ejemplo y con los hombres que han defendido mi derecho a ser mujer, con todo lo que eso implica y sin avergonzarme.
Mi días casi siempre han terminado con conversaciones esperadas, con amigos de otros rincones del planeta, con conversaciones sobre el cristianismo callejero. Y hasta con ese quitado de máscaras para dejar que otros vean lo debil, lo vulnerable, lo sensible y fragil que uno es. Esto también ha sido posible despues de un caminar con Jesús quien no escondió el dolor, el temor ni su propia vulnerabilidad y que tampoco calló a quienes se lo expresaron o a quienes acudieron a él deshechos, esperanzados, desesperados o muertos de miedo. Por tampoco yo he estado conforme con muchos paradigmas, con muchos moldes y con esas formas autoritarias de dirigir a otros. Prefiero que juntos aprendamos a seguir al maestro, que invitemos a otros a seguirlo, a descubrirlo y en el camino, enseñemos también lo que hemos aprendido...
Creo que serán unas vacaciones escolares permanentes, hasta que de nuevo me convierta en una estudiante matriculada en posgrado, pero por mientras, seré estudiante de la vida y seguiré diviendo mi tiempo en semestres, porque así lo hacen aquellos a quienes anhelo servir, acompañar y amar estos años que vienen.
Solo he podido estar dos días en la universidad desde que llegué de CR. Mi cuello no me ha permitido mucho, pero mi corazón ha estado 100% ahí. Vi a una amiga de tiempo, que por circunstancias adversas dejó la escuela, pero ahora ha vuelto y me sigue dando la oportunidad de ser amiga y compartirle sobre Jesús, el que cambió mi vida. También he visto a otros que son caras conocidas, pero sus corazones me estaban velados. Hoy especialmente agradecí por una conversación que me hizo ver como Dios obra de maneras maravillosas y sorprendentemente sencillas y que mientras uno se siente incomprendido por ser cristiano, por no adaptarse al molde religioso y por solo querer hablar de Jesús en la escuela, hay otros que viven lo mismo y nos encontramos allí! Esta amiga que hoy conocí mejor, me dejó conocerla más de cerca y eso le agradezco, me enseñó mucho.
Tal vez de las emociones más bonitas de estos días ha sido estar en contacto con los compas de Oaxaca. Haber hecho contacto nuevamente, después de casi un mes me ha dado un gozo bien profundo, porque sé que a pesar de las dificultades, del contexto político complicado de la UABJO y de los mil obstáculos que puedan existir, hay estudiantes en la brecha para hacer algo, para llevar buenas noticias de verdad a sus compañeros, a su mundo, a su escuela. Y aunque sea de lejos, me encanta escucharlos, ser parte y si se puede, acompañarlos.
...estos días también he leído de más. La característica es que ha sido mucho sobre mujeres. En el evangelio de Lucas sobre mujeres, el libro de Hacer Teología junto a María, otro sobre ensayos desde el feminismo teológico latinoamericano y una novela de la tica Ana Cristina Rossi. Todo me ha llevado de reformularme algunas preguntas, a ver la reivindicación de Jesús, a amar mejor a la mujer y al hombre, a querer relaciones sanas, reconciliadores, que expresen el verdadero propósito del Creador y a preguntarme, ¿cómo, desde mi trinchera como estudiante, obrera, amiga, hija, lectora y de pronto escritora de blogs, puedo ser portadora de estas buenas noticias de Jesús para todas y todos? Donde nadie se excluye, donde la experiencia de conocer a Jesús no se limita a una sola vivencia, en un solo lugar, bajo una sola condicionante, y donde el ser mujer también es importante... y donde el descubrirlo es parte de reconocernos como creación de Él, amadas por Él.... No tengo la respuesta, pero estas lecturas aun inconclusas me han ayudado: junto con las conversaciones matutinas y nocturnas con el que me hace plantearmelas, y bueno, mucho de lo que hoy soy y pregunto también tiene que ver con esas mujeres que me han sido ejemplo y con los hombres que han defendido mi derecho a ser mujer, con todo lo que eso implica y sin avergonzarme.
Mi días casi siempre han terminado con conversaciones esperadas, con amigos de otros rincones del planeta, con conversaciones sobre el cristianismo callejero. Y hasta con ese quitado de máscaras para dejar que otros vean lo debil, lo vulnerable, lo sensible y fragil que uno es. Esto también ha sido posible despues de un caminar con Jesús quien no escondió el dolor, el temor ni su propia vulnerabilidad y que tampoco calló a quienes se lo expresaron o a quienes acudieron a él deshechos, esperanzados, desesperados o muertos de miedo. Por tampoco yo he estado conforme con muchos paradigmas, con muchos moldes y con esas formas autoritarias de dirigir a otros. Prefiero que juntos aprendamos a seguir al maestro, que invitemos a otros a seguirlo, a descubrirlo y en el camino, enseñemos también lo que hemos aprendido...
Comentarios
Publicar un comentario